Jimmy Michaels está obsesionado con su nueva madrastra, Jessica Ryan. Ella pensó que era dulce, pero lo que realmente quería era tener relaciones sexuales con ella, mirándola siempre que sea posible. Jimmy dejó a Jessica un regalo, que pensó que era de su esposo, en forma de consolador de succión. Lo intentó en el baño, y cuando atrapó a Jimmy masturbándose con ella, decidió disciplinarlo ... ¡y también se satisfizo!