Minori está casada con su marido y vive con su suegro desde hace cuatro años. Está muy contenta con su vida matrimonial, pero lo único con lo que no está satisfecha es con el asunto de la almohada de la pareja. Ambos acordaron tener relaciones sexuales el día de la ovulación de Minori para que le resultara más fácil quedar embarazada. Pero la relación sexual fue corta, su marido solo quería que ella recibiera su semen para que pudiera quedar embarazada sin prestar atención a sus sentimientos. Aunque estaba decepcionada, no tenía otra opción. Se estaba duchando cuando se encontró con su suegro. Al darse cuenta de que su nuera no estaba satisfecha con el sexo, la menospreció y compensó el placer que brinda el sexo, que su esposo no puede darle. Después de eso, cada vez que llegaba el día de la ovulación, después de tener relaciones sexuales con su esposo, iba a ver a su suegro para que pudiera eyacular dentro de ella, llenando los sentimientos vacíos dejados por su esposo con los sentimientos máximos de felicidad que traía su suegro ...