Mimi Saotome, quien seduce a Karami con su atractivo sexual más que nunca. En el momento en que la puerta de la habitación se cierra, el deseo sexual estalla como una bestia. No tiene vergüenza en mostrar su aspecto lascivo y en llevar el miembro del hombre hacia su propia zona íntima. "Oh, quiero hacer el amor hasta morir," debió pensar.