La verdadera alegría proviene de mirarse el uno al otro. El beso profundo y apasionado se busca con anhelo... ¡Dedicando tiempo a lamer cada rincón! Dos personas embelesadas en sus pasiones, embriagadas de dulzura, intensamente. Los invito a ver el acto sexual más tenso y serio en la historia de Miyuki Yokoyama.